Las puertas automáticas nos ofrecen comodidad y seguridad en nuestro día a día, pero como cualquier mecanismo, requieren de ciertos cuidados para asegurar su funcionamiento óptimo y prolongar su vida útil. Un mantenimiento adecuado no solo evita futuras averías, sino que también garantiza la seguridad de quienes las utilizan. ¡Sigue estos sencillos consejos que te traemos desde Automatismos Naveira y disfruta de tu puerta automática por mucho más tiempo!
Inspección visual: la clave para detectar problemas a tiempo
Presta atención a posibles ruidos extraños durante la apertura o el cierre, holguras en las guías o en las hojas, y cualquier signo de óxido o corrosión. Revisa que no haya objetos que puedan obstruir el movimiento de la puerta, como pequeñas piedras o ramas. Una detección temprana de estos pequeños detalles ayuda a prevenir averías mayores y un desgaste acelerado de los componentes.
Igualmente, no olvides revisar el estado de los elementos de seguridad, como fotocélulas y bandas sensibles, asegurándote de que estén limpios y funcionando correctamente.
Mantenimiento preventivo: lubricación y ajustes para un funcionamiento suave
La lubricación es fundamental para reducir la fricción entre las partes móviles de tu puerta automática. Aplica lubricantes específicos en bisagras, rodamientos, guías y cualquier otro punto de fricción según las recomendaciones del fabricante. Esto garantizará un movimiento suave y silencioso, impidiendo esfuerzos innecesarios en el motor y otros componentes.
Así mismo, revisa periódicamente la tensión de las correas o cadenas, y asegúrate de que los tornillos y las fijaciones estén bien apretados. Unos ajustes sencillos pueden prevenir vibraciones y desgastes prematuros.
Limpieza regular: eliminando los agentes externos que dañan tu puerta
La acumulación de suciedad, polvo, hojas y otros residuos afecta al correcto funcionamiento de tu puerta automática y acelerar su desgaste. Limpia cada poco tiempo las guías y las hojas con un paño húmedo y un detergente suave. Presta especial atención a las ranuras y los desagües para prevenir la acumulación de agua, que puede provocar óxido.
En zonas costeras como A Coruña, aconsejamos aplicar productos protectores específicos para evitar la corrosión. Una puerta limpia no solo luce mejor, sino que también funciona de manera más eficiente y duradera.
Cuidado del motor y del sistema electrónico: protegiendo el corazón de tu puerta
El motor y el sistema electrónico son el cerebro de tu puerta automática, por lo que su cuidado es crucial. Asegúrate de que la caja del motor esté bien ventilada y protegida de la humedad y el polvo. Trata de no sobrecargar el sistema con un uso excesivo o forzado de la puerta.
Mantenimiento y reparación de puertas automáticas en a Coruña
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